A través de este cuento trabajamos las emociones, el protagonista es un monstruo que tiene un lío con las emociones, así que le ayudamos entre todos a organizarlas y conocer cada una de ellas. Para ello lo primero que hicimos fue realizar nuestro propio monstruo de muchos colores.
Ordenamos las emociones:
RABIA: ROJO
MIEDO: NEGRO
CALMA: VERDE
ALEGRÍA: AMARILLO
TRISTEZA: AZUL
y nosotros añadimos el AMOR: ROSA
Hicimos nuestras propias botellas, las cuales decoramos con etiquetas para identificar cada una.
También realizamos cada uno un dibujo de una de las emociones que nos provocaba el estar alegres, tristes, en calma... y estos son algunos de nuestros dibujos, los cueles fuimos guardando en las botellas.
Ahora ya tenemos las emociones ordenadas y vamos a dejar al monstruo descansar un poco, pero al volver de las vacaciones podremos seguir expresando nuestras emociones, compartirlas con los compañeros y las compañeras y guardarlas en su botella correspondiente.
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