Entre las hojas que trajo Lola para compartir con sus compis de 4 años B venía escondido un caracol que quiso visitar nuestra aula. Cuando los niñ@s lo vieron se emocionaron tanto que me preguntaron si podíamos tenerlo de mascota en el aula, pero mientras pensábamos cómo nos organizábamos nuestro caracol, que debía de estar enfermo, se murió y eso nos hizo darnos cuenta de que tener mascota es una cosa muy seria porque hay que ocuparse de ella.
Para que no nos volviera a pasar pensamos qué necesitábamos para cuidarlos y decidimos que tendríamos que darles una casa porque "sino se escapan" y comida "porque sino se mueren" y nos pusimos manos a la obra pidiéndole información a las familias para construir UNA CARACOLERA.
Y con la información que llegó al cole nuestro proyecto comenzó a tomar forma y los caracoles que nos regaló Valeria viven muy sanotes y bien mantenidos:
Aunque ya hemos resuelto nuestro interrogante principal: (Podemos tenerlos de mascotas) se han formado otros nuevos que intentaremos resolver poco a poco analizando todo aquello que podáis seguir aportando.
Ahora nos hemos centrado en la comida de los caracoles y estamos experimentando lo que hemos leído... ya os iremos contando los resultados.
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